Unos 400 Triperos vivieron el partido en las instalaciones del Club de Remo. La “Barriada Ensenada Ciudad Tripera” fue quien organizó desde muy temprano una jornada signada por la pasión de un pueblo sufrido como pocos pero fiel y pasional como ninguno.
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Desde el mediodía los Triperos comenzaron a llegar en familia de distintos barrios, no solo de Ciudad de Ensenada sino de distritos cercanos. Choripanes, hamburguesas, cerveza y gaseosas eran parte de una previa que incluyó un colorido único: el club de barrio Campamento completamente embanderado de azul y blanco (tanto fuera como dentro donde se ubico la pantalla), paraguas, banderas de palo, bombos, humo azul y blanco, redoblantes y platillos y trompetas. Además, las bombas de estruendo se hacían escuchar desde bastante lejos en la propia ciudad como llamando a los Triperos a no perderse de la fiesta más allá del resultado deportivo.
Los hinchas vivieron el juego alentando constantemente y sin detener el compás de bombos y trompetas El final fue con la decepción de perder el partido, pero con la satisfacción de dejar en claro una vez más, que Ensenada fue, es y será por siempre Tripera
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